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Revista: 50 AÑOS DEL CONGRESO FEBS EN MADRID 1969-2019


El complejo contexto de la VI Reunión de FEBS (Madrid,1969)

“El contexto político no debe nunca impedir actividades basadas en el rigor científico”.

“La comunidad científica, académica, artística, intelectual en suma, no defiende nunca a sistemas dictatoriales y excluyentes”.

“Atreverse a saber… y saber atreverse”.

  • Federico Mayor Zaragoza

  • Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, UAM – CSIC, Madrid.

ESTADO DE EXCEPCIÓN

Llevábamos más de dos años preparando cuidadosamente la VI Reunión de FEBS, que debía celebrarse en España (Madrid, 7 a 11 de abril de 1969), con el beneplácito y el entusiasta apoyo del entonces ministro de Educación y Ciencia José Luis Villar Palasí, y conscientes de la necesidad de demostrar a la comunidad científica mundial que el contexto político dictatorial en el que nos hallábamos no iba a influir en absoluto en las facilidades para el desplazamiento y libertad de expresión de los participantes

 

Como se muestra en los excelentes Recuerdos de la VI Reunión de FEBS que figuran en este mismo ejemplar de la revista SEBBM, del que son autores Carlos Gancedo y Juana María Gancedo, la reacción de algunas sociedades bioquímicas europeas desaconsejando la asistencia a la reunión requirieron, para contrarrestarlas, una gran actividad tanto de la comisión nacional como de científicos de relieve mundial para asegurar la celebración y el éxito de la VI Reunión. Guardo aún las actas, perfectamente redactadas por Carlos Asensio, de las ocho reuniones que precedieron a las sesiones extraordinarias en las que voy a centrar la presente contribución.

 

Voy a exponer sucintamente las relaciones que de forma rápida y eficaz, se establecieron con el secretariado de la FEBS al respecto, y mencionaré la ayuda inmensa que representó la inteligente y tenz actuación de los profesores Severo Ochoa y Hans Krebs... que intervinieron personalmente y manifestaron que ellos sí acudirían, por lo que resultó ser una gran conferencia bioquímica de la época.

 

Estaba claro que no podía argumentarse el boicot solo basándose en que España era una dictadura cuando, ocho años antes, en 1961, se había celebrado en Moscú, en pleno auge de la Unión Soviética y, en el mismo momento en que el presidente Krushev decidía elevar el Muro de Berlín, un gran congreso de la International Union of Biochemistry (IUB)… y, en 1968, la V reunión de FEBS había tenido lugar en Praga. Una vez más, se confundía la aversión lógica a un sistema dictatorial con las aspiraciones de la ciudadanía y, en particular, de la comunidad científica. Como luego detallaré debe argüirse, en favor de los “contestatarios” que propiciaban el boicot a la reunión en Madrid, que la declaración del estado de excepción en España el 4 de enero de 1969, con numerosos y esenciales artículos suspendidos, contribuyeron a una imagen todavía más negativa de la dictadura española. Así, se argumentaba que la actitud de no asistencia se mantendría únicamente “mientras durara el estado de excepción”.

 

 

"... PARA LA DEFENSA DE LA DEMOCRACIA EN ESPAÑA"

Como puede observarse en el documento de petición de la Sociedad Bioquímica Sueca de finales de enero de 1969 (anexo 1), que se distribuye por el Secretario General de la FEBS con el título de Petición a todos los “faculty members” e investigadores para la defensa de la democracia en España, ya en su primera versión va firmada por personalidades como F. Gross, E. Lederer, G. Schapira, F. Jacob o A. Lwoff, etcétera.

 

A la Sociedad Sueca se añaden 48 faculty members de la Universidad de Constanz, que solicitan cancelar la VI reunión de la FEBS “a la vista de los últimos actos dictatoriales en España”. En el mismo escrito, se indica igualmente que la Sociedad de Bioquímica de Dinamarca ha adoptado una actitud similar a la Sociedad Sueca.

 

Y añadía: “El establecimiento del estado de excepción en España, con la abolición de libertades fundamentales de los ciudadanos españoles, nos induce a adoptar una actitud similar (a la que hacía poco había tenido lugar en Grecia) en relación al gobierno español, mientras dure el estado de excepción… requerimos a todos los científicos y universitarios de todos los países que suspendan su participación en congresos científicos en España, ya que podría ser interpretado como apoyo a la actual política del gobierno español”.

 

 

RAPIDÍSIMA INTERACCIÓN ENTRE LA FEBS Y LA SEB

El profesor Carlos Asensio, secretario general del Comité Ejecutivo Español, reacciona de forma inmediata y precisa indicando en conversación telefónica con el profesor Datta que FEBS es una organización científica y no política, y que no procede en absoluto dar crédito y seguir las sugerencias de quienes desconocen la realidad y las garantías que, en el presente contexto, ha sido capaz de obtener el Comité Ejecutivo Español. 

 

El día 5 de febrero de 1969, el profesor Arnstein, secretario general de FEBS, se dirige al presidente de la comisión española del Comité Ejecutivo para la celebración de esta reunión, en los siguientes términos (anexo 2): “Querido profesor. Villanueva, como usted puede observar por los documentos anexos adjuntos, dos sociedades han expresado su profunda preocupación por la declaración de la ley marcial en España y el cierre de universidades, ya que estos acontecimientos pueden afectar a la reunión de FEBS en Madrid… Será necesario considerar como una cuestión de urgencia la acción que debe ser adoptada y, en consecuencia, convoco una reunión del Comité Ejecutivo que tendrá lugar en Londres el domingo día 16 de febrero”.

 

 

Arnstein argumenta en su correspondencia de esos días que “está de acuerdo en que FEBS no es una organización política… pero que debemos considerar la posibilidad de que las condiciones presentes en España puedan repercutir en la reunión de Madrid”. Y añade: “En su carta no me indica usted específicamente cómo la presente situación podría afectar la organización y participación del encuentro. Por ejemplo, ¿podemos tener la certeza de que todos los bioquímicos españoles y extranjeros podrán participar en la reunión sin ningún tipo de restricciones? ¿Cómo afectará el que se hayan cerrado las universidades a la organización de la reunión y a la asistencia de estudiantes?”. Y el Prof. Arnstein vuelve a insistir en el posible efecto de la “ley marcial” (!) en la organización de la reunión.

 

La respuesta del Prof. Julio Rodríguez Villanueva dos días más tarde, el 9 de febrero, después de una larga reunión del Comité Ejecutivo, es de una contundencia realmente extraordinaria (anexo 3): “Querido Prof. Arnstein, el jueves día 6 ha circulado usted un telegrama a todos los Secretarios de las Sociedades FEBS solicitando su punto de vista en relación al escrito de la Sociedad Sueca… Haber actuado de esta manera sin conocimiento del presidente de la FEBS constituye, según la opinión unánime del Comité Ejecutivo de la VI Reunión, una acción irregular, perturbadora e impropia. El Comité unánimemente apoya mi inmediata respuesta telegráfica en la que le decía: “Me hallo profundamente sorprendido por su comportamiento. Tenga en cuenta que yo soy el Presidente de la FEBS…”. Comenta luego que la gravedad de su inadecuado proceder se incrementa por el hecho de que el mismo día 5, antes de que enviara la circular por telegrama, el Dr. Asensio llamó por teléfono al Prof. Datta en Londres indicándole que la información contenida en el escrito de la Sociedad Bioquímica Sueca no se correspondía con la situación local y con los preparativos que se estaban llevando a cabo.

 

 

Añade a continuación el profesor Rodríguez-Villanueva que la rápida distribución de los escritos conlleva a una alarma innecesaria… precisando que en España no se ha declarado una “ley marcial” sino un “estado de excepción” durante tres meses. Y, además, que no se han cerrado todas las universidades sino, en estos momentos, dos de quince universidades públicas. De hecho, añade, “tanto yo como nuestro vicepresidente, el profesor Federico Mayor, nos hallamos dando nuestras clases en las universidades de Salamanca y Granada, respectivamente”. 

 

Termina su escrito comentando la seguridad de no interferencia recibida del Ministerio de Educación y diciéndole que si quería a pesar de todo tener una reunión, podría celebrarse en Madrid con el Comité Ejecutivo en pleno… “de tal forma que tuvieran ustedes también una información directa de cuál es la situación actual y de las previsiones para la celebración de una exitosa reunión de FEBS en Madrid el próximo mes de abril”.

 

Esta carta se envía a otros miembros del Comité Ejecutivo de FEBS, los profesores Campbell, Datta, Lièbecq y Sorm.

 

El día 14 de febrero, el profesor W. J. Whelan, escribe a Arnstein en términos muy positivos en relación a la celebración de la reunión de FEBS en España y concluye diciendo: “Los mejores deseos. Nos vemos en Madrid”…

 

VUELVEN LAS AGUAS A SU CAUCE

Es importante destacar el escrito distribuido en circular (Circular no.79, anexo 4) referido a la VI Reunión de la FEBS en Madrid, que firman los profesores Arnstein y Datta el 15 de febrero. Después de manifestar cuáles son las circunstancias que podrían fundamentar la cancelación de una reunión de la FEBS, ambos ponen de relieve que los días 14 y 15 de febrero se desplazaron a Madrid para discutir este tema con los miembros del comité organizador español. También se entrevistaron “con el Dr. Taylor, del British Council, que lleva viviendo cinco años en Madrid”… y concluyen diciendo que “contrariamente a lo indicado en algunos informes de prensa, la ley marcial no se ha establecido en España y que las autoridades civiles continúan con sus responsabilidades plenas, si bien se ha establecido un estado de excepción… En la medida de nuestras informaciones, podemos concluir que las medidas que comporta no afectan a los científicos españoles”.

 

 

“En cuanto a las universidades solo dos están cerradas —las de Madrid y Barcelona— esperándose, además, su rápida reapertura. Por todo lo anterior, concluimos que las condiciones para la celebración de una reunión establecidas al principio de este escrito se cumplen totalmente y “recomendamos en consecuencia que la VI Reunión FEBS, incluyendo las reuniones del Consejo y de los Comités, se celebren tal como estaba previsto”.

 

Lo mismo repite Arnstein en las circulares que envía los días 16 y 17 de febrero

 

Considero relevante destacar, finalmente, el escrito que escribe Laurent, secretario de la Sociedad Sueca de Bioquímica a Arnstein el día 27 de febrero. Le dice que “sigue preocupado por la situación en España”, pero que a la vista de su escrito, enviarán un representante oficial a la reunión… si ya en aquel momento todas las universidades se hallan abiertas. Termina indicando que los miembros de la Sociedad de Bioquímica Sueca podrán decidir ir a Madrid, si así lo deciden individualmente.

 

MÁS DE 2000 ASISTENTES, ENTRE ELLOS 8 PREMIOS NOBEL

No cabe duda de que la firme posición del comité organizador, unidos a las múltiples llamadas telefónicas de algunas de las cuales fui testigo, del profesor Severo Ochoa y del profesor Hans Krebs, tuvieron un efecto muy positivo y pudo finalmente celebrarse con un gran éxito de asistencia —más de 2000 personas— la VI Reunión de FEBS en Madrid. La asistencia a una reunión previa en Madrid (ver fotografía) de personalidades como los profesores —de izquierda a derecha— Cori, Ochoa, Krebs y Theorell constituye un buen reflejo de la importancia de la reunión. Es también interesante indicar que el “estado de excepción” concluyó en el mes de marzo, “desaparecidas las circunstancias que motivaron la declaración”.

 

Sí: ¡más de 2000 asistentes y entre ellos, ocho Premios Nobel! Y el programa con la portada dibujada por Dalí…“La reunión ha sido un éxito rotundo”, escribió el Profesor Severo Ochoa a los miembros del Comité Ejecutivo.

 

Estamos viviendo ahora momentos de gran complejidad, convulsión y olvido del pasado: brotes de supremacismo, marginación del multilateralismo democrático… La forma en que se defendió en 1969 la libertad de acción científica en cualquier circunstancia, y la firmeza y convencimientos de quienes lideraron una reacción bien argumentada de la comunidad científica pueden servir hoy como punto de referencia para las “hojas de ruta” que son imprescindibles y apremiantes.


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