Lixiviados: Minimización de la influencia de los consumibles de plástico en los flujos de trabajo del laboratorio
eppendorf
Con frecuencia se siguen subestimando las sustancias químicas que se desprenden de los consumibles de plástico lixiviados en la mayoría de las aplicaciones del sector de ciencias de la vida. Sin embargo, cada vez existen más pruebas científicas que demuestran que este grupo heterogéneo de sustancias químicas puede afectar significativamente los experimentos y suponer una fuente probable de errores en diversos sistemas de ensayo.
Es sabido que los aditivos que facilitan el proceso de producción (agentes plastificantes, biocidas, deslizantes) perturban los ensayos biológicos. Por lo tanto, debe evitarse su uso. Los aditivos necesarios para asegurar características del producto (p. ej., evitar la fragilidad) se reducen al mínimo. En el siguiente gráfico se describen las sustancias que pueden migrar desde el plástico y si éstas son críticas para los ensayos.
Debido al breve período de contacto, la ventana de tiempo para la transmisión de las sustancias lixiviables es muy corta. En la literatura científica reciente se discute que los efectos se pueden producir a medida que aumenta el número de pasos de pipeteo, lo que indica un efecto acumulativo.
Por esta razón, un ensayo de tipo MEA (ensayos con embriones de ratón), realizado por un laboratorio externo acreditado y registrado por la FDA, puede demostrar si las células embrionarias se ven influenciados por moléculas de, por ejemplo, aditivos procedentes del plástico de las puntas. Los ensayos con embriones de ratón son sensibles a las sustancias que perturban el crecimiento. Así, los ensayos con embriones de ratón (MEA) son un buen método para validar la influencia de las sustancias lixiviables. Se ha demostrado que las puntas de pipeta de Eppendorf no influyen en el crecimiento de los embriones de ratón.