César Nombela Cano (1946-2022)
Excelente Maestro, gran gestor de la ciencia y amigo incondicional
- Concha Gil, en nombre de todos sus compañeros y discípulos del Departamento de Microbiología de la Facultad de Farmacia UCM.
El pasado 14 de octubre nos dejó el profesor Cesar Nombela, tras sufrir una grave enfermedad que llevó con una gran discreción y ejemplaridad. César Nombela nació el 6 de noviembre de 1946 en Carriches (Toledo). Estudio en el Instituto Ramiro de Maeztu donde forjó grandes amistades que mantuvo a lo largo de su vida. Se licenció en Farmacia y en Químicas en la Universidad Complutense de Madrid (UCM) en 1969. Realizó el doctorado en la Universidad de Salamanca bajo la dirección del Profesor Julio Rodríguez-Villanueva, con el que tuvo una estrecha e importante relación profesional y personal. Allí tuvo la fortuna de conocer a su mujer Nohelly Arrieta, pilar esencial en su vida y con la que tuvo tres hijos ejemplares. Posteriormente, entre 1972 y 1975, se trasladó a Estados Unidos para trabajar como becario postdoctoral en el laboratorio del premio Nobel de Medicina, Severo Ochoa, en la Universidad de Nueva York y en el Instituto Roche de Biología Molecular de Nueva Jersey. Severo Ochoa le nombró en su testamento presidente vitalicio de la Fundación Carmen y Severo Ochoa. La Fundación convoca anualmente el Premio Carmen y Severo Ochoa de Investigación en Biología Molecular para reconocer la labor investigadora de científicos del campo de la Biología Molecular que desarrollen su trabajo en España.
Tras su regreso a España, obtuvo una plaza en el Instituto de Microbiología de Salamanca del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en 1975. Posteriormente, en 1977 obtuvo una agregaduría en la UCM donde empezó a impartir clases de Microbiología en la Facultad de Farmacia y a formar su grupo de investigación. En el año 1981 obtuvo una cátedra en el Departamento de Microbiología de la Facultad de Farmacia de la UCM, donde desarrolló la mayor parte de su carrera académica. Supo rodearse de buenos discípulos a los que inculcó la curiosidad científica, el esfuerzo, la responsabilidad y la importancia que tiene la investigación para ser un buen profesor universitario, con el objetivo siempre puesto en el bien de la sociedad. Consiguió numerosos proyectos nacionales e internacionales además de colaboraciones con la industria, gracias a los cuales pudo equipar de forma más que adecuada el Departamento de Microbiología e impulsar enormemente la investigación de su grupo, del que siempre estuvo muy orgulloso, y supo potenciar las diferentes cualidades de cada uno de sus integrantes. Su investigación inicialmente se centró en el estudio de la pared celular de la levadura Saccharomyces cerevisiae como diana de nuevos agentes antifúngicos. El descubrimiento y secuenciación del gen de la MAP kinasa Slt2 y el estudio de dicha proteína de gran relevancia en la respuesta a estrés de la pared celular abrió una línea de investigación muy importante en el campo de la señalización celular. Sus estudios pioneros en genética y biología molecular de la levadura patógena oportunista Candida albicans le permitieron abrir otra notable línea de investigación para estudiar la interacción de C. albicans con el organismo humano durante el proceso infeccioso.
Fue consciente de la importancia de la tecnología para el avance de la investigación y promovió la creación en la UCM de los Centros de Apoyo a la Investigación de Citometría de flujo y de Genómica y Proteómica. La Unidad de Genómica se creó en 1990, en gran parte debido a la necesidad de disponer de técnicas de secuenciación para participar en el Proyecto Europeo de secuenciación del genoma de S. cerevisiae, primer organismo eucariota secuenciado. En el año 2001 se incorporó la tecnología proteómica, siendo este servicio pionero en España y sirviendo de apoyo a muchos proyectos de investigación. En el año 1996 fue nombrado presidente del CSIC, puesto que desempeñó durante cuatro años. También en este periodo supo rodearse de un gran equipo. Trabajó sin descanso para mejorar la investigación y consiguió numerosas plazas para incorporar a jóvenes investigadores a pesar de las restricciones económicas. Estaba muy satisfecho de ello y muchos investigadores del CSIC han afirmado públicamente que fue un excelente presidente.
A pesar de su gran dedicación a dicha institución, siempre tenía un momento para las personas de su grupo que íbamos a contarle nuestros avances en las diferentes líneas de investigación. Tenía una gran capacidad para seguir estando al día en todos los temas y aportar nuevas ideas y fuentes de financiación.
Fue elegido Académico de Número de la Real Academia Nacional de Farmacia en 2007, institución a la que también dedicó todo su esfuerzo con la organización de sesiones de la más alta calidad científica.
En 2012 fue nombrado Rector de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo y de nuevo se rodeó de grandes profesionales. Realizó un trabajo ingente para buscar financiación pública y privada y poder llevar a cabo una gran cantidad de cursos de altísimo nivel. También es importante destacar su labor para promover la enseñanza de la lengua española. En el Palacio de la Magdalena supo crear una atmosfera especial donde se fusionaban los grandes avances en investigación y las manifestaciones más actuales de las artes. Los miembros de su grupo seguíamos manteniendo una estrecha relación con él. Siempre estaba a nuestra disposición para asesorarnos y ayudarnos en todo lo que estuviera en sus manos.
En 2018 volvió a la universidad hasta su jubilación como emérito, tras lo cual siguió apoyando a nuestro departamento y manteniendo lazos de unión con nosotros hasta el último momento.
Los que tuvimos la enorme suerte de cruzarnos con él en nuestra vida, de conocerle docente, científica y personalmente, podemos considerarnos muy afortunados. Fue una excelente persona y un gran maestro. Tuvo la habilidad de formar muy buenos equipos y afianzar su amistad. Trabajó sin descanso para mejorar la investigación en España. Con su desaparición, la comunidad científica pierde un gran referente para muchos investigadores. DEP.